La “Misión” de Juan Pablo Prieto Cox, es salvar la Universidad de Aysén. A tres meses de su llegada el Administrador Provisorio, habla sobre el futuro de la casa de estudios. Para fin de año pronostica números azules, proyecta la creación de nuevas carreras y buscará la instalación total en Coyhaique Alto. Todo a pesar del pasado reciente que hizo tambalear el proyecto regional. “Era una cuestión de vida o muerte”.
Por Mauricio Muñoz Zambrano
Es verdad que el anhelo de tener una universidad estatal en Aysén se remonta antes del Movimiento Social de Aysén, “Tu problema es mi problema”. Pero, también es verdad que fue la manifestación social lo que generó el marco político para su creación vía decreto de la presidenta Michelle Bachelet y que dio origen a la U de Aysén en agosto de 2015.
Desde esa fecha a la actualidad la Universidad ha visto pasar tres rectoras y un rector. Hoy la representación legal está en manos de Juan Pablo Prieto Cox.
Es Matemático de profesión, con una vasta experiencia y liderazgo en universidades chilenas como la Universidad de Talca, Santiago, Católica y la Universidad Federico Santa María. Este currículum lo candidateó para que la Superintendencia de Educación Superior lo nombrara Administrador Provisorio de la Universidad de Aysén.
La razón de su llegada se debió al riesgo vital que corría la universidad. La estatal acarreaba varios años sin ver números azules, sueldos impagos, manifestaciones de estudiantes, cortes de servicios básicos en los edificios universitarios, un campus que se esfumaba y un proyecto “regional” que se diluía entre sueldos excesivos y una evidente sobredotación de funcionarios y académicos.
En Radio Genial FM, Juan Pablo Prieto Cox fue conciso explicando la situación en la que estaba la U de Aysén a su llegada, “La Universidad tenía un déficit acumulado de bastante dinero en los últimos años, lo primero que hicimos fue pedir un préstamo al Banco Estado, entre otras medidas y así se pudo pagar los sueldos del personal”.
En términos académicos el escenario actual demuestra una significativa baja en la matrícula en la mitad de las carreras impartidas, “Había una sobredotación de académicos, pero más de funcionarios”, señala el representante legal de la U.
Al poner algunos ejemplos, Prieto comenta que Ingeniería Forestal ha estado en una situación de déficit , este año logró ocho matrículas, una situación similar ocurre en otras ingenierías como ingeniería civil industrial e ingeniería informática y también en agronomía, obviamente dice Juan Pablo Prieto, la crisis en la Universidad produjo un impacto en la matrícula.
De responsabilidades, el origen de la crisis y las medidas de ajuste
Para el actual ente administrativo el origen de la crisis se basa en una gestión deficiente y la pérdida del objetivo en la misión institucional.
“Mayoritariamente el problema fue una cuestión de gestión, de propósitos, no se tomaron las decisiones correctas, hubo un problema de orientación y propósitos institucionales”.
Se desprende entonces que quienes estuvieron a cargo de la universidad no lograron sacar a flote los objetivos, tanto así que los antecedentes de la administración de los rectores y directivos anteriores incluyendo a Natacha Pino y Enrique Urra, fueron entregados a la Contraloría General de la República para su revisión y acciones que correspondan. Considerando que en términos financieros la universidad solo logró tener números azules un solo año desde el 2019 a la fecha. Acrecentando la crisis financiera.
En lo administrativo y sobre las investigaciones internas y en base el informe de la Superintendencia de Educación Superior, Juan Pablo Prieto Cox, dijo en la Radio Genial de Coyhaique que se comprobó una especie de préstamo interno que pasó de una cuenta a otra, cosa que no corresponde, “ese préstamo deberá ser devuelto por nosotros”
En este contexto, Prieto detalla que si no se hubiera tomado las decisiones que terminaron por disminuir el numero de docentes y funcionarios y otras medidas de ajuste y recortes, la Universidad no hubiese podido salir de la crisis. “Consideramos fundamentos racionales y sobre eso tomamos las difíciles decisiones, era una cuestión de vida o muerte”
“Sin el ajuste que hubo, no había manera que la Universidad pudiera sostenerse financieramente. En recursos humanos se gastó de más, no en el día a día. Mirado en perspectiva, había señales, Desde el 2019 hasta la fecha hubo solo un año en azul, todo el resto fue con números rojos”. Precisa el administrador.
¿Qué pasó con el sumario anunciado por el exrector Urra?
En la misma Radio Genial y en una entrevista anterior, el ex rector Urra, anunció un sumario interno para determinar responsabilidades, frente a esto el nuevo administrador dijo que eso está en manos de la Contraloría, “Está en manos de la Contraloría Regional, se solicitó la realización de un sumario, pero eso se derivó a la Contraloría, creemos que hay más independencia, es más sensato, da más garantías”.
La situación actual de los exrectores Pino y Urra
Actualmente Natacha Pino está ejerciendo como profesora en la Universidad de Aysén y el exrector Enrique Urra, se encuentra en la misma situación, trabajando solo como docente pues al iniciarse un proceso de “intervención” corresponde suspenderlo del cargo de rector. En concreto Enrique Urra ha sido suspendido de su cargo, al igual que todos quienes integraban el cuerpo de directivos de la universidad. Sin capacidad, ni atribuciones administrativas.
EL FUTURO DE LA UNIVERSIDAD
Sobre el futuro, el Campus en Coyhaique Alto y nuevas carreras
Al entrar en el futuro de la casa de estudios, Prieto se muestra esperanzado, habla con seguridad y los números lo abalan. Las proyecciones para fin de año hablan por primera vez en años de números azules, puede que sean menores, pero después de una crisis que casi provocó el naufragio del proyecto, hay buenas expectativas.
“Esperamos llegar con números azules de aquí a fin de año y proyectamos tres buenos años para la universidad. Estamos buscando financiamiento a través del PDZE, también lograr el RS, Es un objetivo a mediano y largo plazo, pero hacia allá apuntamos”, detalla Prieto.
El plan de navegación del AP, entre otras cosas considera instalarse completamente en el campus ubicado en Coyhaique Alto, en principio con edificios modulares, similares a los que se usaron en la Universidad Estatal de O´Higgins y para eso, se han autoimpuesto un plazo de tres años, “nos vamos a instalar en Coyhaique Alto, nos vamos para allá en los próximos tres años debería estar toda la Universidad funcionando allá”.
Desde su llegada el 15 de enero, Juan Pablo Prieto inició un trabajo intersectorial para evaluar la creación de nuevas carreras en la Universidad de Aysén. Sin embargo, reconoce que lo primero que se debe hacer, es revitalizar las careras que están más débiles, entre las que se cuentan las ingenierías y agronomía, En paralelo la Universidad evaluará el nacimiento de nuevas carreras.
“La Universidad va a crecer y vamos a crear nuevas carreras y las carreras que les ha costado afirmarse, las vamos a revisar, revisaremos sus mallas, no se trata de cerrar carreras, primero vamos a analizar las problemáticas y tomaremos decisiones. Debemos buscar el perfil adecuado de las carreras, debemos fortalecer las carreras y que los jóvenes se matriculen en estas”
Las áreas que concitan el interés del jefe de servicio universitario están: Salud y la Administración Pública, sin dejar de lado proyecciones en capacitaciones, educación continua y post grados, “Podemos explorar los segundos niveles de educación, capacitaciones o post grados. Salud y la cosa pública son áreas que deben incorporarse, sobre todo en la educación continua. La Universidad debe incorporarse a esas áreas”
Juan Pablo Prieto Cox, el nuevo “mandamás” de la Universidad de Aysén se la juega y lanza una frase final: “La Universidad va a convertirse en una institución que va a ser clave en el desarrollo de la región, así lo apuesto”.